La Vega

Café de tueste natural

Hugo Gualaco es caficultor desde que tiene memoria. Creció viendo a su madre y a su abuelo entre cafetales, y fue precisamente su abuelo quien le regaló sus primeras mil plantas de Caturra, dándole no solo un oficio, sino una forma de vida.

Hoy, con 43 años, Hugo gestiona junto a su esposa y sus dos hijos la finca La Vega, en San Adolfo (Acevedo). Una finca que empezaron de cero, en un terreno donde apenas crecía nada, y que con trabajo y paciencia han ido transformando en un proyecto familiar que apuesta por el café de especialidad como medio de vida y motor de futuro.

Hugo no deja de formarse: visita con frecuencia el laboratorio de café de Pitalito, donde perfecciona sus conocimientos como productor, pero también como catador, tostador y barista. Porque para él, hacer las cosas con el corazón no es solo un lema, es una manera de trabajar que se nota en cada taza.

Este lote de Caturra Natural se recolecta cuando las cerezas están maduras, se selecciona por flotación, y pasa por una fermentación anaeróbica de 90 horas. Después se seca al sol durante unos 21 días en camas elevadas. Todo el proceso está pensado para resaltar lo mejor del terroir y del trabajo de Hugo y su familia.

Conservar en lugar fresco y seco.